La sonrisa de un Tolo que quiere otro refuerzo.
Débora D'Amato ddamato@ole.com.ar
El Tolo Gallego reclama un punta para armar el
Independiente que pelee arriba y se olvide del tan temido descenso.
“Ya me
equivoqué bastante”, reconoció en un mano a mano con Olé.
-¿Si Racing te saca a Dorlan Pabón, te vas?
Ni loco
renuncio. No hay chances de que me vaya de Independiente. No me voy bajo ningún
punto de vista. Cantero me prometió un delantero sí o sí. Confió en que llegará
rápido.
Con esas palabras Américo Gallego arrancó anoche la
charla con Olé .
¿El motivo?
Ayer, tras un impulso casi catártico, declaró en
conferencia de prensa y paralizó el corazón de todos en el Rojo: “Si el vecino
me quita un delantero, voy a evaluar seriamente continuar o no”.
Es cierto que Independiente transita uno de los
momentos más duros de su historia futbolística y el Tolo es el capitán de un
barco que él mismo intenta enderezar para que no caiga al fondo del mar.
El DT
asume la importancia de este semestre y, consciente de que no hay margen de
error, planifica y diagrama un futuro tan inmediato como inquietante.
-En tu carrera jamás sufriste luchar de abajo...
No les doy margen para el descanso. Focalizo mucho en
el diálogo, algo que antes no hacía. Mis jugadores siempre se tienen que sentir
más que los rivales y eso no es chamuyo, es una realidad.
-Con la experiencia que tenés. ¿Cómo los ves?
Cansados
pero motivados. No hay una diferencia y eso me sorprende. Están muy unidos, al
pie del cañón. En serio me sorprende que no haya diferencias. Me siento muy
respaldados por ellos y sinceramente eso es impagable.
-¿La clave es el trabajo y la motivación?
Sí, sin
dudas. La gente cumple un papel fundamental en este semestre.
-El hincha del Rojo siempre tuvo un gusto exquisito,
pero daría la sensación que este semestre espera resultados y no juego
vistoso...
Es cierto eso pero jugar bien nos va a llevar a ganar.
Estoy convencido de eso. A la larga, ganás. Jugando mal es difícil que puedas
sostener buenos resultados. Una vez... Ponele dos pero hipotecas tu realidad
apostando a algo así. Jugando bien se gana y no es una frase hecha.
-Y a los jugadores, ¿qué les decís?
Que no me gusta
hablar de descenso. Y que se entienda porque después hablan giladas. La
realidad está a la vista pero nosotros, como equipo grande que vive una
urgencia, debemos ser conscientes pero no enloquecernos. Debemos pensar en
positivo y en lo más alto de la tabla de posiciones porque en definitiva una
cosa lleva a la otra.
-¿Hiciste un balance del Torneo Inicial?
Sí. Ya me
equivoqué bastante, no me equivoco más.
-¿Cuáles fueron esos errores?
El partido que refleja
mis errores es el que jugamos contra Belgrano. Quise ganarlo y me equivoqué
porque el empate para nosotros era muy bueno pero la locura por ganarlo me hizo
pifiarle en algunas decisiones. Lo salí a ganar y perdí un partido increíble.
Contra Colón fue otro. Nos quedamos en el segundo tiempo, nos tiramos atrás yo
le erré con los cambios. Salió caro. Metí a pibes que no la pudieron bancar y
no es error de ellos, no era fácil entrar en ese partido.
-¿Tenés el equipo para el Torneo Inicial?
Algo tengo pensado.
Quiero repetir los 11 de memoria al menos siete partidos. Me gusta la
competencia sana que hay en este plantel. Vargas y Battion se van a sacar
chispas. En la defensa tengo otro problema. Ahora atacamos con más. Antes era
centro y que Farías haga lo que pueda. Ahora, el Rolfi la pasa redonda y
transmite alegría.
-¿Qué significa el Rolfi?
Mucho. Lo veo igual que en
el 2002. No cambió nada. Tiene gambeta, contagia su alegría y sus compañeros lo
respetan. Clave en un equipo que necesita ganar muchos partidos.
Fuente Olé

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