Por Bruno Carbajo
Por
cuestiones diplomáticas, el Rojo aún no cobró una de las cuotas por la venta de
su joya y el dinero se encuentra en observación hace más de dos años.
La imagen
de Alan Velasco como jugador de Independiente vive hace años en el recuerdo
popular del hincha. Se cumplirán tres temporadas desde la partida del juvenil
rumbo al FC Dallas de la Major League Soccer (MLS), cuando luego de dejar un
grato recuerdo tras ser la figura del Rojo durante meses, se marchó a cambio de
un elevado monto de 7 millones de dólares. Sin embargo, con el enganche ya
superando los 70 partidos en su actual club, su relación con el Rojo aún
perdura de forma indirecta. Y no por razones deportivas, sino que por
cuestiones económicas. Sí, habiendo transcurrido 34 meses, desde Avellaneda aún
aguardan por recibir una de las cuotas correspondientes a la transferencia.
Velasco
acordó su salida de Independiente en enero de 2022, en una negociación llevada
adelante por la gestión de Hugo Moyano
en el club. En ella, se acordó un plan en cuotas con el FC Dallas, en donde las
últimos giros serían de 1 millón de dólares. No obstante, por más extraño que
parezca, en las arcas del club logró impactar sin ningún problema la última
transferencia, pero así no lo hizo la penúltima.
¿Cómo es
posible de suceder tal desorden? Para ello, será necesario recapitular hacia el
2022 y abrir el horizonte por fuera del ámbito que rodea al Rey de Copas. Según
pudo averiguar Infierno Rojo, aquel millón de dólares aún se encuentra
pendiente de recibir, en cierto punto, a causa del conflicto bélico entre Rusia
y Ucrania. Exacto, increíble, pero real.
La cuestión es la siguiente: en su momento, desde la MLS realizaron la transferencia correspondiente, en los tiempos pautados, hacia una cuenta bancaria que Independiente posee en el exterior. Para que el dinero pueda ingresar al país, el Rojo necesitaba de un corresponsal bancario, una entidad que presta servicios a otra entidad financiera en un país diferente, actuando como intermediario para realizar operaciones que requieren acceso a mercados locales a los que el banco cliente no tiene acceso directo. En este punto es donde inicia el conflicto para Independiente por la mera razón que el corresponsal elegido por la dirigencia de Moyano era de origen ruso. El problema fue que, en paralelo a dicha transacción, estalló la guerra entre Rusia y Ucrania.
Como
consecuencia, Independiente la terminó ligando. Teniendo en cuenta la tensa
relación diplomática entre Estados Unidos y Rusia, la operación efectuada por
la MLS rumbo a Avellaneda fue puesta en observación por la Oficina de Control
de Activos Extranjeros (OFAC), organización que depende del departamento de
tesoros de la nación norteamericana, con el objetivo de garantizarse no estar
financiando a organismos vinculados con el estallido del conflicto bélico.
Desde aquel
entonces, Independiente todavía se encuentra a la espera de poder recibir la
penúltima cuota por Alan Velasco. A raíz que la MLS ya expidió el dinero hacia
la cuenta bancaria internacional del Rojo, la transacción se considera iniciada
y no existe la posibilidad de dar marcha atrás con la operación. Además, el
corresponsal a cargo de la misma ya no puede cambiar.
Entonces, ¿cómo hizo el club para cobrar la última cuota si no pudo recibir el dinero correspondiente por la penúltima? Todo se debe a que, con el cambio dirigencial en el medio, a pesar de haberse pautado las condiciones de pago durante la conducción de Moyano, la actual comisión logró cambiar el corresponsal que actuaría de intermediario en el pago final. De esa manera, se pudo avanzar con la operación.
En lo que
respecta al millón de dólares en stand-by, Independiente tiene iniciados los
correspondientes reclamos que se encuentran a su alcance. Considerando que no
existen muchas formas de agilizar la situación, el caso recibió un número de
expediente y el club contrató a un estudio nacional con corresponsal en el
exterior que se encargan de gestionar como de realizar las averiguaciones
necesarias para monitorear la situación. Por lo tanto, el propio Independiente,
más allá de los esfuerzos, desconoce cuando el embrollo económico llegará a su
fin.
Sin
embargo, dentro de lo negativo que representa para el club no contar con nada
menos que un millón de dólares en sus arcas, el único consuelo al que puede
aferrarse es que, en algún momento, el dinero impactará. Sin importar que sea
una transferencia efectuada hace casi tres años, el dinero no está perdido.
Este
aspecto lleva a que, al momento de presentar los presupuestos anuales,
Independiente se encuentra en la obligación de incluir de forma provisoria el
dinero que representa la penúltima cuota por la venta de Velasco, anhelando que
en algún tramo de la temporada se vuelva realidad. Y así será hasta el momento
en que se cobre, que puede ser en un mes, el próximo semestre o el siguiente
período dirigencial.
Fuente
Infierno Rojo
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