Por Bruno
Carbajo
El jugador Uruguayo
bajó de la Primera para sumar minutos y fue la pieza clave que devolvió al
triunfo al equipo de Pedro Monzón.
Con un
ataque de primera, la Reserva de Independiente volvió al triunfo. En los pies
de Santiago Hidalgo y el goleador de la tarde Baltasar Barcia, junto a los
aportes de Nicolás Vallejo, se resume la victoria del equipo de Pedro Monzón
por 1-0 ante Godoy Cruz, por la octava fecha de la Copa Proyección, para seguir
a paso firme en la zona de clasificación.
En Villa
Domínico, con un juego ordenado y criterioso en lo que fue un encuentro
friccionado, Independiente pudo sortear la ausencia de su figura Tomás Parmo
(citado a la Selección Sub 17) al contar con la presencia de un tridente de
ataque conformado por integrantes de la Primera División, que ante la falta de
rodaje bajo las órdenes de Julio Vaccari, bajaron de categoría para sumar
minutos y tuvieron la posibilidad de darle un valor agregado al equipo.
Así fue
como desde el inicio del partido, las primeras ilusiones del Rey de Copas
estuvieron bajo la gambeta de Nicolás Vallejo. El chaqueño volvió a ponerse la
camiseta de Independiente por primera vez luego de finalizar su préstamo con
Talleres de Córdoba y respondió con creces, a base de pura explosividad y
gambeta por ambas bandas. Igualmente, Mateo Morro respondió con seguridad las
pocas veces que el equipo visitante intentó pisar el acelerador.
Con un
remate lejano que pasó rozando el travesaño y un desborde con el que ingresó
con pelota dominada dentro del área para brindar un centro hacia atrás, Vallejo
supo protagonizar las jugadas de mayor peligro de parte Rojo en los primeros 45
minutos. Incluso, la última situación debió haber derivado en la sanción de un
penal a favor: Francisco Funes conectó el centro y definió con el arco en
soledad, pero el brazo extendido de un defensor rival, cual atajada de arquero,
envió el balón al córner sin la percepción del árbitro.
El festejo
del gol de Barcia (@ph.arita)
En el
complemento, como se empieza a ser costumbre en el equipo de Monzón,
Independiente llegó al gol. A los 33 minutos, con una excelente asistencia
entre líneas, Hidalgo dejó mano a mano a Barcia para que en un toque amague con
simpleza al arquero y simplemente deba empujar la pelota para festejar su
primer gol como Diablo, tras regresar de su cesión desde el Cruciúma de Brasil.
Por fuera de la jugada del gol, ambos también tuvieron un laborioso y
participativo encuentro.
Incluso,
Hidalgo, que lució la cinta de capitán, tuvo la oportunidad inmejorable para
marcar. Fue en el inicio del segundo tiempo, cuando entró por el segundo palo
con la misión de empujar la pelota, luego de que Gonzalo Bordón cabeceara en un
tiro de esquina, pero se terminó escapando por arriba del travesaño para que el
joven delantero se agarre la cabeza sin poder creerlo. Por su parte, Barcia y
Vallejo fueron alternando en la ejecución de la pelota parada como también se
desempeñaron como extremos por ambas bandas.
Con una
conexión que puede repetirse en los entrenamientos del plantel de Vaccari,
Hidalgo y el uruguayo de 23 años, cumplieron con un fenómeno que empieza a ser
cotidiano en el equipo de Monzón: el 80 por ciento de sus goles (ocho de diez)
en lo que va de la Copa Proyección fueron anotados en los segundos tiempos.
Con este
triunfo, Independiente escaló al cuarto puesto de la Zona B y, con 12 puntos,
se afianzó en al zona de clasificación a los octavos de final. La próxima fecha
recibirá a Defensa y Justicia, relegado en la 11° ubicación.
Fuente
Infierno Rojo
