Sorprendió a todos. Julio César Falcioni estuvo junto al
equipo el viernes por la noche en la concentración y el sábado se subió al
micro para viajar a La Plata. Su asistencia generó emoción y más aún cuando
rompió en llanto cuando Independiente le ganó a Estudiantes.
El DT sufrió la pérdida de su esposa el pasado miércoles y
atraviesa un duelo muy duro; sin embargo, decidió reincorporarse rápidamente a
sus labores para ocupar tiempo, esfuerzo y cabeza ante un panorama triste.
Este lunes también estuvo en el predio de Villa Domínico con
el plantel para realizar la práctica previa al choque contra Bahía. Será un
partido fundamental en la Copa Sudamericana y el Emperador dijo presente; como
lo hará de acá hasta el final de este semestre.
Los propios futbolistas reconocen públicamente que la
presencia del técnico les da fuerzas, por el ejemplo que significa tenerlo cara
a cara pese a tamaña pérdida. El Rojo tendrá una semana determinante, con
partidos literalmente definitivos y hace falta que estén todos juntos.
Fuente Infierno Rojo
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