Son días de cambios en
Independiente. Luego de la partida de Lucas Pusineri, suena Hernán Crespo como
su reemplazante, pero con todo un equipo de trabajo detrás de él. Resulta que
junto con Valdanito llegaría un cuerpo técnico conocido en 2017, con Alejandro
Kohan a la cabeza.
Es en el único lugar donde a un
preparador físico se le da tanta trascendencia, pero hay una realidad: sin
Kohan, Crespo no era llamado. De hecho, los primeros contactos fueron con el
profe, quien dejó un buen recuerdo en sus pasos anteriores por el club.
La primera fue en el año 1996. En
aquella ocasión, el Profesor estuvo junto con Luis Bonini, y compartieron el
cuerpo técnico con dos entrenadores. El primero fue Gregorio Pérez, y luego
llegó César Luis Menotti. En aquel entonces, el Rey de Copas no levantó ningún
título pese a que tuvo buenas actuaciones (terminó segundo en el Apertura,
nueve puntos debajo de River).
En la segunda ocasión, fue 21 años
después. En 2017, Kohan retornó junto con Ariel Holan y juntos hicieron una
revolución. Tomaron un plantel insultado y silbado, y lo convirtieron en una
máquina arrolladora. Sin grandes nombres, lograron que Independiente tenga un
juego que rememoraba a los viejos equipos gloriosos, y coronaron eso con el
segundo Maracanazo del más grande. En aquel año, el Rojo volaba, era imparable
en cada encuentro.
Sin embargo, se separó de Holan y,
luego de un tiempo sin un equipo, se juntó con Hernán Crespo, hoy candidato a
ser el director técnico del Diablo. ¿Conseguirá repetir el trabajo realizado en
2017?
Fuente Infierno Rojo
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