Por Augusto Fraschina
El Tucu podría pagar muy caro el
caño que no le salió contra el Granate. ¡Enterate los detalles!
Desde su llegada en julio del 2018
de la mano de Ariel Holan, Pablo Hernández nunca ha terminado de alcanzar su
potencial en Independiente. Es que las expectativas en su llegada eran muchas,
pero el Tucu nunca pudo explotar. Cuando tuvo su momento, lamentablemente se
lesionó. Y cuando se le presentó la posibilidad de reivindicarse, cometió un
grave error que podría ponerle un final de ciclo.
Independiente había abonado más de
un millón de euros para adjudicarse con la ficha del futbolista nacionalizado
chileno, que venía con un gran presente en Celta de Vigo y titular en su
seleccionado. Ariel Holan quería reforzar el equipo con jerarquía, ya que tenía
la Copa Libertadores a su alcance. Sin embargo, su rendimiento no estuvo 100% a
la altura.
Un año después y con la
impaciencia presente, Sebastián Beccacece decidió brindarle la titularidad en
el mediocampo, y allí Hernández comenzó a tener otro nivel. Fue la figura en
todos los partidos hasta su rotura de ligamento cruzado, en el encuentro de ida
de Cuartos de final de la Copa Sudamericana 2019, ante Independiente Del Valle.
Tras más de un año de recuperación
y con Lucas Pusineri en el banco de suplentes, el veterano futbolista retomó la
titularidad, pero ya no con el mismo rendimiento; aunque internamente ayudó al
desarrollo de los más chicos.
Pero en el momento más importante
del 2020 para Independiente, Hernández cometió el error que posiblemente lo
deje afuera del plantel en 2021. En la revancha de Cuartos de final ante Lanús
por la Copa Sudamericana, con el partido 0-0 y con el Rojo dominando, el
jugador intentó de forma innecesaria un túnel adentro del área, que derivó en
el primer gol del Granate, que luego aprovechó el golpe anímico para liquidar
fácilmente la llave.
Después de la eliminación, el Tucu prácticamente quedo corrido del equipo. Es evidente que ha sufrido un castigo y posiblemente el encuentro ante Lanús haya marcado su destino con la casaca roja. O al menos, a raíz de su alto contrato, la idea dentro de la dirigencia es encontrarle una salida en este mercado de pases.
¿Valdrá la pena borrar a Hernández
después de un error garrafal? ¿Su jerarquía es un elemento a tener en cuenta
para no borrarlo? Hasta aquí, el futbolista llegado en 2018 jugó 52 partidos, anotó
6 goles y marcó una asistencia.
Fuente Infierno Rojo
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