Mientras algunos dirigentes insisten con la intervención de
la Asociación a través de la IGJ, desde la cúpula máxima del fútbol advirtieron
que Argentina podría quedar fuera del sistema si esto ocurre. Por su parte, el
'Chiqui' Tapia afirmó su candidatura y expresó: "Estoy convencido de que
la Casa no va a ser intervenida"
Las estrategias de los bandos están claras. Los encolumnados
detrás de Angelici pretenden que haya intervención de la AFA para que se
modifique el Estatuto lo antes posible y tenga lugar la ya famosa Superliga.
Los del lado de Tapia y Moyano quieren que se celebren las elecciones el 30 de
junio y después de ello se debata por la posibilidad de la reforma en los
campeonatos.
Mientras tanto, desde la FIFA bajaron un mensaje: no importa
de dónde provenga la intervención, habrá sanción para Argentina en caso de
llevarse a cabo. En un principio, habían dejado en claro que el Gobierno no
estaba en condiciones de tomar las riendas de la Casa de Viamonte dejándola
ilesa dentro del sistema del fútbol, pero ahora fueron por más y anunciaron que
si la Inspección General de Justicia aparece en escena, también habrá un
posible apartamiento.
Concentrado con el contingente albiceleste que afrontará el
amistoso con Honduras en San Juan, Claudio Tapia tomó la palabra en TyC Sports
y brindó algunos conceptos. "No tendría que pasar nada extraño ni pensar en
intervenciones antes de las elecciones", dijo primeramente, y continuó:
"No se me ponen los pelos de punta con esa posibilidad, pero estoy
convencido de que no va a suceder".
El Chiqui, quien tiene la banca de los clubes del Ascenso,
afirmó su candidatura, pero dejó lugar para que algún colega suyo compita en
los comicios: mencionó a Hugo Moyano, Nicolás Russo y Marcelo Tinelli. En
tanto, aceptó que hay diferencias puertas adentro de la sede de Viamonte y
expresó su deseo: "Queremos que la liga argentina sea la mejor del
mundo".
Por último, subrayó que la Superliga recién podría llegar a
tener lugar a mediados de 2017 y con menos clubes en Primera y B Nacional y
recordó crudamente la asunción de Luis Segura en el poder: "Tuvo que salir
del velorio de Julio (Grondona) y sentarse en su sillón. No fue nada fácil. Por
eso tiene que haber un presidente legitimado con el voto".
Fuente Play Fútbol
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