Los delanteros de Independiente tuvieron una pésima noche y no pudieron doblegar a un débil Unión. ¡Mirá!
El empate entre Independiente y Unión dejó algunas
cuestiones para analizar, una de ellas el ataque. El Rojo tuvo más la pelota,
pero a la hora de arriesgarla, nunca supo qué hacer. Se llenó de malas
decisiones que depositaron siempre el balón en los pies del rival.
Hablar de que Sebastián Palacios tuvo una mala noche y no
pudo explotar su velocidad, tal vez es lo más sencillo. El Tucu no supo decidir
cada vez que tuvo la posibilidad de torcer el rumbo del partido y se fue
diluyendo en la mediocridad del equipo. Sin embargo, el mal fue más general, ya
que Alan Velasco fue otro que atravesó una noche para el olvido. La Joya
intentó ser revulsivo como siempre, pero abusó de la individual, ignorando a
sus compañeros, y perdió la pelota en reiteradas ocasiones.
Párrafo aparte para Silvio Romero. El capitán y goleador no
tomó dicho rol durante el cotejo, y marcarlo se les hizo excesivamente sencillo
a los defensores del Tatengue. No fue referencia en ataque ni tampoco pudo
ganar con el cuerpo, y para colmo, gozó de un regalo que terminó desperdiciando
de manera insólita.
En conclusión, el ataque de Independiente fue un mar de
imprecisiones, donde ni los ingresos de Andrés Roa y Jonathan Herrera pudieron
mejorar el funcionamiento. Con dos futbolistas que casi no aparecieron y uno
que lo hizo siempre abusando de la jugada individual, el Rojo no pudo quebrar a
un rival que estaba entregado. A falta de dos fechas, el Rey de Copas debe
mejorar notablemente si desea clasificar a Cuartos de Final.
Fuente Infierno Rojo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.