Independiente ya tuvo dos partidos bajo el mando de Julio
Falcioni, y no fueron precisamente buenos. Si bien le ganó a Patronato y cayó
con Lanús, el juego del Rojo fue muy pobre en los dos encuentros, y el
mediocampo fue el centro de todas las miradas. Es que, en esa zona, el Rey de
Copas no tuvo quite, y fue un lugar de paso para sus rivales.
El doble cinco formado por Pablo Hernández y Domingo Blanco
no funcionó. El primero debía encargarse de la distribución, y falló varios
pases que bien podrían haber sido jugadas interesantes para el Diablo. El
segundo, por su parte, tenía que hacerse cargo de la marca, y le costó horrores
debido a que no es su mayor fuerte.
Si bien los de Avellaneda están a la espera del regreso de
Lucas Romero, el Perro podría cumplir la función que ahora debería hacer el
Tucu. Al lado suyo haría falta que vuelva Carlos Benavídez, pero el uruguayo se
encuentra en rehabilitación y, por eso, el Emperador insistió en la
incorporación de un cinco. Esa tarea la puede cumplir Adrián Arregui, ya que
era lo que hacía en los clubes donde estuvo (Huracán, Independiente Medellín,
Temperley, etc.), por lo que, con su inclusión en el equipo, el Orgullo
Nacional podría recuperar en el centro de la cancha y arrancar los ataques
desde más adelante.
Lo cierto es que, de cara al encuentro con Gimnasia,
Falcioni deberá resolver el dilema del mediocampo, ya que Independiente sufre
mucho y lo atacan constantemente. Ya se sabe que la dupla entre Hernández y
Blanco no funciona, por lo que todo parece indicar que podría haber una
renovación en ese lugar. ¿Será el turno de Arregui?
Fuente Infierno Rojo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.