Desde las 21:30 del miércoles, Independiente visitará a
Fénix en Uruguay. El partido se jugarán en el Estadio Parque Alfredo Víctor
Viera, casa de Montevideo Wanderers. Allí, el Rojo buscará rendimiento y
resultado para definir todo en Buenos Aires una semana después.
Aunque lo niegue, es evidente que Lucas Pusineri puso como
prioridad la Copa Sudamericana. Todavía tiene serias chances de avanzar en la
Copa de la Liga Profesional, pero el DT guardó titulares para este encuentro
internacional. Está a las claras que no sólo preservó a los que tenían alguna
molestia, sino que no quiso arriesgar a los indiscutidos (indiscutidos por
nivel o porque no tienen competencia en el puesto).
Hasta aquí, el Orgullo Nacional ha mostrado solvencia en el
fondo. No es que no le llegan, pero la realidad es que le convierten muy poco.
El problema es que en el área de enfrente pasa exactamente lo mismo: faltan
acción de gol y las posteriores conversiones.
Puntualizando en la mitad de la cancha, el entrenador parará
a Lucas Romero y con él plantará un eje que sería completado con Lucas González
a la izquierda, Domingo Blanco a la derecha y Alan Soñora por delante, de
enlace. Estos cuatro nombres podrían rotar constantemente y pasar de un 4-2-3-1
a un 4-3-3, en incluso forzar un 4-4-2, aunque no son las características
ideales para ellos.
Por supuesto que las principales alternativas siguen siendo
Pablo Hernández, Andrés Roa y Federico Martínez, aunque Carlos Benavidez dejó
una imagen aceptable y también será llevado al banco de suplentes. Fénix no
será un rival sencillo para este Independiente en plena formación, por eso hace
falta el ritmo y la dinámica que estos elegidos demostraron que pueden dar.
Fuente Infierno Rojo
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