El semestre no arrancó de la mejor manera para
Independiente. El Rojo tuvo un comienzo aceptable en el ámbito doméstico, con
un triunfo y un empate, pero quedó eliminado de la Copa Sudamericana a manos de
Santos, un rival al que había sacado en los anteriores cinco cruces. Sin
embargo, hay una falta importante de precisión en la línea delantera.
Ya sea por jugadas que no se concretan como por chances
claras que se fallan, los atacantes aún no pudieron inflar la red del arco
rival. Tanto en la ida con Santos como en el duelo con Argentinos, el más
grande contó con chances para ganarlo, pero falló. En la vuelta con el Peixe,
sin embargo, fue peor: Fue decididamente superior a su rival, con chances netas
de gol, y no pudo definir.
Desde que volvió el fútbol, el Rey de Copas hizo dos goles,
de los cuales uno fue de Lucas González, contra los brasileros, y el otro fue
de Juan Insaurralde, contra Estudiantes. Los delanteros, que son los más
cercanos al arco del adversario, todavía no pudieron reencontrarse con el gol.
Ahora, Independiente tendrá otra prueba con Patronato, donde
necesitará que los atacantes estén finos a la hora de definir. Teniendo en
cuenta la experiencia sufrida con Santos y que al Rojo aún le quedan dos
objetivos, es imperioso que vuelvan a convertir. ¡Que sea el punto de partida!
Fuente Infierno Rojo
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