Eduardo Domínguez dio detalles de cómo vivió el plantel de
Huracán el accidente automovilístico sufrido en Venezuela, en 2016
Publicado el 16 de diciembre de 2021
El entrenador de Colón, que este sábado define el Trofeo de
Campeones con River, compartió sus vivencias de aquel día y sentenció: “El
chofer nos salvó la vida”
Edu Domínguez reconoció que el chofer le salvó la vida al
plantel de Huracán, en el accidente que sufrieron en 2006, en Venezuela
Eduardo Domínguez no suele dar entrevistas. Reservado, de
perfil bajo, elige que su trabajo hable por él. Sucedía cuando jugaba,
defendihttps://lanacionar.arcpublishing.com/photo/v2/?offset=0endo la zaga con
compromiso y concentración, y sucede en la actualidad, ya con cinco años como
entrenador.
Con el alivio de que todos los hisopados al plantel de Colón
dieron negativos, y antes de una nueva final (frente a River, este sábado, por
el Trofeo de Campeones), Domínguez protagonizó una charla amena con el escritor
Eduardo Sacheri, en donde dio detalles del dramático accidente automovilístico
que sufrió junto a su cuerpo técnico y todo el plantel de Huracán, en la
autopista Caracas-La Guaira, en febrero de 2016.
“El chofer nos salvó la vida”, sentenció sin vueltas el DT
del Sabalero, en el programa Contar la Vida, que emite DeporTV. Y amplió: “Me
acuerdo que en los días previos, veíamos que el micro no estaba en las mejores
condiciones, y que de la manera como manejaba ese chofer no nos daba ninguna
garantía”.
Luego, el viaje a lo que pudo ser un desastre, se hace más
escalofriante: “Recuerdo que cuando estábamos por salir del hotel para el
aeropuerto, bajábamos de Caracas a La Guaira, y le mandé un mensaje a mi
señora: ‘Te aviso cuando llegamos’. Y ella luego llamándome constantemente
cuando se empieza a enterar de lo que sucedía. Y yo no podía avisarle de
inmediato que estábamos bien porque en ese momento había que buscar soluciones
a la desesperación que estábamos viviendo”.
Domínguez luego contextualiza esa situación dramática: “Yo
recién comenzaba mi carrera como entrenador y era la cabeza del grupo. Y como
en un entrenamiento te miran a ver qué indicación das, ahí me miraban para ver
qué hacía. Me acuerdo que escuchamos un ruido cuando bajábamos, y estábamos
todos relajados, riéndonos. Nos habíamos clasificado. Y el chofer le dice al de
seguridad del plantel que lo llame al profe porque se había cortado el freno y
teníamos que ir todos para atrás. Cuando fue el profe va a avisarle a los
jugadores, ellos se reían y seguian escuchando música. Pero cuando me vieron a
mí, pálido, nos fuimos todos para atrás”.
La situación se hizo desesperante. “Entonces, el chofer
quiso hacer un rebaje de cambios y rompió la caja de cambios. Sin frenos, con
la caja rota y en bajada... Las pericias dicen que íbamos a 140 kilómetros por
hora. Por eso digo que el chofer nos salvó la vida. Porque él hace la maniobra
justa para volcar el micro en la última salida de emergencia antes de llegar a
una curva pronunciada, en donde había todo un precipicio. Todo podría haber
sido mucho peor de lo que sucedió. Para nosotros y mismo para la gente.
Podríamos haber chocado a muchos autos, y debajo del precipicio había una zona
de casas. Podría haber sido un desastre...”
Sobre esos segundos de incertidumbre, donde nadie sabía si
iban a sobrevivir o no, Domínguez reconoció:
“Muchos te dicen que en ese momento se te pasa la vida. A mí
no me pasó. Yo tenía a mis hijos muy chiquitos y me decía ‘No estoy preparado
para irme así. Así no’. Por suerte, nos salvamos.”
En su charla con Sacheri, durante la cual también leyeron
parte del cuento El recital de piano, de la escritora argentina Hebe Uhart, el
entrenador de Colón también se refirió, entre otros temas, al abrupto modo en
el que cambió los pantalones cortos y los botines por los zapatos y el traje.
“La verdad es que yo no hice el duelo de jugador a
entrenador. Me embarqué en esto de un día para otro. Perdimos un sábado (0-3
contra Nueva Chicago), el domingo tuve la reunión con el presidente (Alejandro
Nadur), el martes le confirmé que arrancábamos y el miércoles empezamos a
entrenar. Yo no tuve tiempo de procesar si estaba o no preparado para esto. Con
el diario del lunes se ve que sí. O no, pero me fui preparando en el camino.
Inicialmente yo tenía dedicido retirarme en diciembre y lo más probable era que
nos fuéramos un año a Francia con mi familia. Algo pasó que cambió los planes.
Y todavía está pendiente ese viaje a Francia”.
Eduardo Domínguez disputó su último partido como futbolista
profesional en Huracán el 15 de agosto de 2015 (0-3 ante Nueva Chicago) y
debutó como entrenador ocho días más tarde, en un 0 a 0 contra Lanús, en Parque
Patricios. Renunció en septiembre de 2016 y asumió en Colón, donde permaneció
tres temporadas. Desde enero de 2019 dirigió a Nacional, de Montevideo, con el
que ganó la Supercopa Uruguaya. En marzo de 2020 regresó al Sabalero, equipo al
que condujo a su primer título de la historia, la Copa de la Liga 2021, que
levantó tras golear 3 a 0 a Racing en la final, jugando un fútbol de alto
vuelo.
Fuente LA NACION