¿Y si el “diez” es Toto Pozzo?

 

Por Nahuel Lanzillotta

Ante la salida de Velasco, la 10 quedó para Soñora, dueño de un juego más pausado y pensante. Al equipo le falta cambio de ritmo y Pozzo, que hasta ahora jamás fue titular, podría darle ese desequilibrio en los últimos metros.

Hay un vacío tras la salida de Alan Velasco a la MLS por necesidades económicas. Independiente remató a su joya más preciada, esa por la que Eduardo Domínguez apostaba todo en este semestre. El entrenador del Rojo estaba confiado en poder hacer explotar del todo al 10, que con intermitencias mostraba sus cualidades de gambeteador y jugador distinto. Pero Velasco no está más y ahora la 10 quedó para Alan Soñora, en quien se depositan las esperanzas de ver buen fútbol. Sin embargo, el DT irá encontrando el equipo en el camino y de atrás asoma otro talento de la cantera que bien podría darle al equipo lo que necesita: Tomás Pozzo.

 

Toto entró desde el banco ante Arsenal y le dio otra impronta al ataque del local el último martes. Y, de yapa, pudo convertir con un zurdazo el 1-0 que significó su emocionante debut en la red en la máxima categoría. Pero Pozzo nunca tuvo hasta ahora la oportunidad de mostrarse desde el arranque en Independiente.

 

Pozzo, de 21 años, acumula 17 presencias en Primera: 16 por el torneo local y una sola por la Copa Sudamericana (entró en los últimos 3 minutos). Siempre le tocó iniciar sentado entre los suplentes y saltar luego al campo. En total suma 206 minutos. Es decir, algo más de dos partidos enteros. Muy poco. Siempre fue considerado por Julio Falcioni como pieza de cambio. Y en más de una oportunidad su aparición en el complemento fue importante para generar una reacción de mitad de cancha hacia adelante.

 

Este martes ocurrió lo mismo. A Independiente le falta cambio de ritmo. Tiene un juego lento y previsible, carente de sorpresas. El rival sabe por dónde y cómo atacará. Y eso le cierra las puertas de cualquier arco. Velasco le brindaba esa cuota de frescura. Soñora parece ser un futbolista de otras cualidades, más pensante, con mayor pausa y más pase filtrado que gambeta o vértigo.

 

Pozzo podría ser quien más se asimila al juego de vértigo y desequilibrio que le está faltando al cuadro de Avellaneda. Y hasta ahora nunca pudo demostrar lo que puede brindar como titular. ¿Será momento de darle la chance?

Domínguez tiene un largo camino por delante, aunque él sabe -y lo dijo- que acá “no te esperan”. Mientras intenta encontrar un funcionamiento, necesita buenos resultados al unísono. Recién van dos jornadas de la competencia local. En el horizonte asoman la Copa Argentina y la Sudamericana. Además de probar para dar con la mejor formación posible, el técnico deberá rotar seguramente llegado el caso.

 

Soñora tiene una gran calidad. Pero por haber heredado la “10” sabe que no tiene el puesto ganado. Y tiene en claro que en Pozzo se le presenta un competidor directo en un puesto clave para la generación de juego en los últimos metros. Independientemente del número de camiseta, el “diez” rojo puede ser otro.

 

 

Fuente Infierno Rojo