Independiente volvió a la victoria luego de algunas fechas y
logró una importante bocanada de aire fresco. No brilló pero mereció el triunfo
y en InfiernoRojo analizamos las claves del partido.
Orden desde el arranque: Independiente jugó un encuentro
ordenado desde el minuto cero, con tenencia y algunos atisbos de desequilibrio.
No fue una maquinita pero siempre fue más que el rival. Fundamental para jugar
el partido que quiso Independiente.
Reacción ante el gol: La mala fortuna quiso que el Rojo se
viera en una injusta desventaja por una carambola. Sin embargo, a diferencia de
lo ocurrido contra San Lorenzo, el equipo de ninguna manera se replegó y salió
decidido a buscar el empate. Clave.
La otra carambola: A veces, la suerte también es clave y en
esta ocasión jugó para el lado más justo. El empate fue fundamental para
consolidar el crecimiento del equipo y para dejar el segundo tiempo encaminado
para dar vuelta el encuentro.
El mediocampo más efectivo: Que Ariel Holan se decida por la
dupla Nicolás Domingo y Pablo Pérez en el medio, le dio solidez al equipo.
Juntos apretaron al rival, que dicho sea de paso, marcaba y presionaba con todo
lo que tenía. Dicha solidez permitió que los mediocampistas más ofensivos
puedan soltarse más. Importantísimo.
El penal: Independiente llegaba y buscaba el gol. Llegó a
través de un tiro desde los doce pasos, y fue clave que Fernando Gaibor
convirtiera, teniendo en cuenta la baja tasa de conversión de tiros penales que
tiene este equipo.
Fuente Infierno Rojo
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