El Puma Gigliotti está imparable: es el goleador del torneo,
el máximo anotador de la era Holan y ya alcanzó la marca de Agüero en el Rojo.
Por Favio Verona
Tiene razón Emmanuel Gigliotti cuando sostiene que está
atravesando el mejor momento de su carrera. No sólo los números respaldan su
afirmación: la gente de Independiente le regala ovaciones todos los partidos,
las camisetas con su nombre inundan las tribunas del Libertadores de América,
sus compañeros le ofrendan elogios de forma constante y lo reconocen como un
líder.
A sus 31 años, el delantero surfea la cresta de la ola.
Un tsunami de goles le permitió enterrar las dudas de Ariel
Holan en cuanto a quién debe ser el dueño del área.
Con ocho gritos en la misma cantidad de encuentros
disputados (619 minutos), el Puma es el goleador de la Superliga. Su doblete
ante Huracán (3-1) le permitió alcanzar la misma cantidad de conquistas que
tuvo Sergio Agüero en el club: ambos festejaron en 23 oportunidades.
Si bien el Kun logró esa marca en 56 partidos y Gigliotti en
62, el mérito es enorme. Y más allá de que desde el punto de vista futbolístico
no existe margen para incurrir en comparaciones, el ex Boca saca ventaja en
cuanto a los títulos obtenidos en Avellaneda: festejó una Sudamericana y la
Suruga, mientras que el jugador de Manchester City no pudo dar vueltas
olímpicas con la camiseta del Rojo.
El Puma llegó al club en febrero del año pasado y es el
máximo artillero del ciclo de Holan seguido por Martín Benítez, quien convirtió
16 goles en ese período. Con sus ocho gritos en el torneo local, Gigliotti
anotó además el 33% de los goles de Independiente en lo que va del semestre. El
punta arribó al club luego de haber jugado dos años en el Chongqing Lifan de
China. Los hinchas lo recibieron con mucho escepticismo.
“Vengo de no jugar al fútbol, porque lo que se juega allá es
otro deporte”, admitió apenas desembarcó.
En sus primeros partidos fue resistido, aunque supo
reinventarse en el Rojo y se ganó el respeto y el afecto de la gente luego de
sus dos goles ante Libertad (3-1) y de su tanto contra Flamengo en Avellaneda
(2-1), por la Sudamericana.
A principios de este semestre, Holan evaluó sacarlo para
mandar a Silvio Romero al área. Pero el Puma ganó la batalla y resistió a
fuerza de goles. No por nada los dirigentes le duplicaron el sueldo y le
fijaron una cláusula de u$s 20 millones.
Fuente Olé
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