Independiente le ganó 1-0 a Banfield con gol de Martín
Benítez, el mismo que había errado el penal definitorio en la Recopa. El 7 jugó
un gran partido y fue ovacionado por el público durante toda la tarde. El
equipo de Ariel Holan volvió a mostrar todo el fútbol y la garra ante un rival
complejo. ¡Excelente victoria para pensar el inicio de la Copa Libertadores!
En Avellaneda, Independiente ganó un partido fundamental
para levantar cabeza. Luego de la desazón por la final perdida ante Gremio en
Brasil, el Rojo recibió a Banfield, otro equipo golpeado por la eliminación de
la Libertadores a manos de Nacional. Con un partido superlativo del equipo en
general, el local justificó el triunfo a lo largo de los 90 minutos.
Aún con el dominio el encuentro, el Orgullo Nacional volvió
a chocar con su falta de eficacia, un viejo enemigo. Primero le pásó a Leandro
Fernández, que definió por arriba un pase exquisito, y después lo sufrió
también Nicolás Figal que abrió demasiado el pie cuando quedó mano a mano con
Iván Arboleda. Entre otras situaciones, también se perdieron las suyas Silvio
Romero y Emmanuel Gigliotti, y a Fernández le volvió a pasar lo mismo cuando
ingresaba por atrás para definir una pelota impecable de Juan Manuel Martínez.
Sin embargo, el fútbol siempre da revancha, y todo pareció
indicar que el destino quería que lo ganara Martín Benítez. El misionero había
jugado un partidazo en Porto Alegre con la salvedad de que le atajaron su
penal, ese que valió la Copa para Gremio. Para el encuentro con Banfield, no
estaba convocado, pero él quiso jugar igual y vaya si lo hizo: Recuperó la
pelota, jugó en equipo y, para sumar a su gran labor, le dió el triunfo al
Diablo.
Corrían los 23 minutos de la primera parte cuando Diego
Rodríguez Berrini recuperó una pelota y tocó de primera para Benítez, que se
adelantó unos pasos y, con un derechazo impecable, puso la pelota junto al
palo. Inmediatamente, el delantero rompió en llanto, mientras que de las
tribunas no paraban de corear su nombre.
De esta forma, Independiente llegó a los 29 puntos y, con un
partido menos (aún debe el encuentro con San Lorenzo), se ubica en zona de
clasificación a la Copa Libertadores 2019. ¡A seguir así, Rojo!
Fuente Infierno Rojo
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