Por Matias Carusso
Más allá del crecimiento futbolístico que mostró el equipo
desde su llegada a Independiente, Ariel Holan sabe que tiene en el debe una
arista a mejorar y el martes pasado quedó demostrado.
Quizás sea, junto con las pelotas paradas en contra, la más
sobresaliente. Se trata de las ejecuciones desde los doce pasos. En los últimos
20 meses, el Rojo fabricó once faltas adentro del área: convirtió seis y le
atajaron cinco.
De los cinco que no pudieron convertir, cuatro fueron en
torneos internacionales (Alianza Lima, Atlético Tucumán, Nacional y Santos).
¿El restante? El que falló Ezequiel Barco ante Lanús el año pasado.
Sin embargo, Barco es el más eficaz desde el punto penal en
la era Holan: cambió por gol cuatro de cinco disparos. Lo sigue Maximiliano
Meza (un tanto sobre dos), Leandro Fernández (uno sobre tres) y cierra Emmanuel
Gigliotti, a quien le atajaron el único que pateó. ¿Responsabilidad del
ejecutante o mérito del arquero?
Además, cabe destacar que durante el período del Profesor al mando del Rey de Copas tuvo dos definiciones por penales con suerte dispar: contra Camioneros ganó 5-4 (solo falló Meza) y frente a Gremio perdió 5-4 (el único que erró fue Martín Benítez).
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