Independiente igualó 0-0 ante Talleres, cayó por 4-2 en los
penales y quedó eliminado de la Copa Argentina. En LocoXelRojo analizamos las
claves de la derrota.
La postura: Si en algo se destacó Independiente en esta
racha de 5 triunfos consecutivos, era por su presión alta y su temperamento. En
Chaco se volvió a observar a ese equipo tímido, lento y parado más en zonas
defensivas que en zonas de ataque. Tal es así que Independiente concretó
solamente 4 remates en todo el partido, de los cuales 2 fueron al arco.
El físico: En el segundo tiempo, el Rojo sintió el desgaste
y se lo vio fundido físicamente. El técnico no corrigió esta situación desde el
banco y Talleres aprovechó para ganar terreno.
Los cambios: Dentro de un equipo que carecía de generación y
tenencia, al técnico se le ocurrió sacar a Tomás Pozzo para poner a Facundo
Ferreyra. Terminó partiendo más al equipo, generando que Talleres se apodere
del medio y que el Rojo no pueda sostener la pelota por mucho tiempo.
Leandro Fernández: El delantero venía siendo el abanderado
en esta racha de triunfos, pero en el partido frente a Unión se lesionó, lo que
generó que no estuviera de la mejor forma física ante la T. Su actuación fue
muy mala. No corrió con seguridad, estuvo impreciso en los pases y se lo notó
muy nervioso, provocando foules infantiles. Tan flojo fue su desempeño que Falcioni
lo reemplazó a los 15 minutos del segundo tiempo por Nicolás Vallejo.
Los penales: El Rojo tuvo mala puntería para definir la serie desde los doce pasos. Leandro Benegas y Facundo Ferreyra ejecutaron con autoridad, pero a Juan Manuel Insaurralde se lo atajaron y el pibe Nicolás Vallejo la tiró afuera. Una lástima, porque Talleres también erró uno.
Fuente LxR
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