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Por Beto Tisinovich
Faltó ímpetu para ganar.
Se escaparon dos puntos ante un rival que se corrió
todo y que con eso solo complicó.
Una lástima porque se perdió otra vez la
oportunidad de igualar en puntos a Argentinos y meterle un poco más de presión.
Además, puede ser peor la cosa si San Martín San Juan le gana a Tigre, ya que
quedará arriba del Rojo en el promedio.
El panorama a tres fechas del final
pinta mal. Ya sé, estamos ahora con más vida que la tarde de la derrota en
Rafaela. Pero a esta altura hay un solo verbo que conjugar: ganar, ganar y
ganar... Sumar de a uno no sirve y más si tenés la obligación de descontarle al
de arriba.
A mi gusto y entender, Brindisi pifió la lectura del partido. Antes,
durante y después. Miguel, quien agarró este avión sin combustible y al menos
ahora lo mantiene planeando, quizá pecó de conformista esta vez.
Desde lo
numérico bárbaro: de 21 puntos sacó 12. Es decir, la mitad de los que sacó
Gallego pero éste en 24 fechas. Desde lo futbolístico va de mayor a menor.
Desde el 0-2 con La Crema cuando el equipo de hombres con apellidos pesados se
borró, se la empezó a jugársela con futbolistas que estaban olvidados y los
mechó con los pibes de la cantera.
Se lo aplaudió y se lo respaldó porque todo
cambió para mejor. Pero vaya a saber por qué, contra Belgrano fue por demás
cauteloso y frente al Pincha sacó al goleador. Insólito, aunque luego el
paraguayo no haya acertado cuando entró. Porque para meter arriba al Rolfi se
necesita un jugador que lleve la pelota, lo habilite a él y a Caicedo.
Y si
bien uno pidió a Monserrat, éste no está para desbordar.
Pizzini era la mejor
alternativa por su velocidad y tranco, pero ni en el banco estuvo. Ahí es otro
punto negativo para el DT.
¿Para qué Fredes, Zapata y Ferreyra?
A Eloy Rodríguez
le pesó el partido y las chances de llevarse los tres porotos se desvanecieron.
Se descata el orden, la actitud y la gente que despidió al equipo con cánticos
de apoyo.
Faltan nueve puntos contra tres rivales complicados.
Esperemos que el
orgullo rojo se haga presente y, como indica la historia, ir al frente.
Explicale eso a tu hijo, que en Independiente sólo se retrocede para tomar
impulso y no se festejan derrotas.
Fuente Olé
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