Por Mariano
Dayan
Hay
situaciones y situaciones.
Una, la del
semestre pasado, cuando era hora de sumar entre tanto bajón, de transmitir
motivación, de elogiar la actitud, de creer permanentemente en el sueño de
quedarse.
Otra es la
actual, la de un Independiente que arrancó el dificilísimo camino de volver a
Primera, una obligación para este grande.
Y muy
consciente de eso, Brindisi tuvo reacciones diferentes en estos distintos escenarios.
Por caso, después de bancar siempre a sus jugadores, ahora pegó como nunca
desde el vamos cuando tuvo que dar la cara tras el cachetazo.
“Sorprendido
por la forma”, fueron sus primeras tres palabras cuando empezó a hablar. Y
hasta le pidió “Perdón a la gente”. Y dijo que no le quedó casi nada “de
positivo”. Brindisi se vio obligado a cambiar el discurso paternalista de
cuando agarró el timón en el torneo pasado.
Ya está, esa
historia ya fue.
Ahora, el DT
quiso dejar en claro que esto no se puede repetir, que no hay más lugar para
partidos como éste. Con altura, sin bajezas, pegó a su manera. Busca rápida
reacción.
Y está bien,
no fue exagerado.
Fuente Olé
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