Por Javier Brizuela
Ayer por la tarde
Eduardo Domínguez brindó una conferencia de prensa, en el marco del comienzo
del nuevo torneo y el mercado de pases.
En la misma,
sorprendió con una frase para Iván Marcone, la novela del receso para
Independiente en los últimos años. El entrenador le metió presión al volante,
hincha del club, que hace mucho quiere venir y hasta el momento nunca se dio:
“Sabemos la clase de
jugador que es y que se siente identificado con el club por ser hincha. Pero yo
tengo una cosa clara; cuando yo quise ir a un equipo, me bajé cinco veces el
sueldo y fui. Cuando quise ir a Huracán, cumplí mi sueño y lo hice”.
Y la respuesta no se
hizo esperar, aunque no vino del jugador, sino de su representante Christian
Bragarnik. El empresario dio una nota en Radio La Red, en la que salió al cruce
del DT:
“El comentario de
Domínguez fue muy desacertado, no coincido en su apreciación, se equivocó. No
conoce a Iván, hace cinco mercados que lo quiere Independiente, yo no lo
ofrecí”.
Luego agregó:
“Iván gana un muy
buen contrato en el Elche, que lo pagó cuatro millones. Él me dijo que por la
mitad va, por sus ganas de ir a Independiente, incluso cobrando pausado. Si el
Club no está para hacer ese gasto, está bien, pero hubieran hecho lo mismo en
los últimos cinco años”.
Por si esto fuera
poco, lejos de enfriar la situación, fue más drástico:
“No me gusta que
manoseen a los jugadores, están jugando con la voluntad de un chico que quiere
ir. Para mi, esta declaración de Domínguez rompe con cualquier tipo de
negociación”.
Habrá que ver si hay
alguna aclaración o charla, y además que piensa el jugador, algo que debería
ser lo más importante aunque al parecer no lo es. Pero tras esto, la chance que
hasta hoy se presentaba como factible, aparentemente pasó a ser lejana.
Fuente Orgullo Rojo
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