Sebastián Sosa (9): Después de un tiempo, volvió a tener una
actuación brillante, evitando varios goles Millonarios. En el primer tiempo
sacó dos con los pies a los 12, ante Borré y Zuculini. Ya en el complemento
tapa con el pie una de Suárez, controla un tiro bajo de Girotti y saca
espectacularmente con la mano una definición sobre el final. Se lo extrañaba al
uruguayo.
Fabricio Bustos (6): Estuvo bien en defensa, de hecho
convierte un gol con esa que le saca a Borré. Pero fue flojo lo suyo con
pelota, perdiendo varias y rechazando hacia el medio. No aportó en ataque desde
los 16, aunque es lógico teniendo en cuenta el desarrollo. Lo aclaré porque ahí
llegó muy bien al fondo y le sirvió el gol a Menéndez.
Sergio Barreto (6.5): Al igual que Rodríguez, es un jugador
que conoce sus limitaciones y se dedica a lo que sabe. Muy fuerte en el mano a
mano, ganó más de lo que perdió ante los muy buenos delanteros rivales. Uno de
los pibes que demostró ser confiable, al menos como alternativa en la zaga.
Alexander Barboza (6.5): Otro de buen partido, con un
balance positivo ante el poderío ofensivo de River. De arriba sacó todo, de
abajo tuvo problemas, como en esa en la que casi le convierte penal a Suárez
sobre la línea de fondo. Exageró buscando anticipar en algunas ocasiones, algo
similar a lo que ocurría con Figal.
Lucas Rodríguez (6): Nuevamente correcto lo suyo, como
siempre. Claramente positivo el balance del lateral traído por Pusineri, que
había quedado libre de Tigre.
Lucas Romero (6): No dominó en el medio, tirado muy atrás
casi obligatoriamente, pero tuvo bunas intervenciones y siempre intentó salir
con criterio en busca de un buen pase para atacar.
Gonzalo Asís (6): Otro de los pibes que con su desempeño
dejó en claro que se puede contar con él, y Berón lo sabe bien, por eso lo
puso. Rindió en una posición extraña, compartiendo el medio del lado derecho.
Salió extenuado sobre el final.
Alan Soñora (6): Hoy no le costó jugar retrasado, ya que
pudo desde ahí conectarse bien y tener la pelota, ganando minutos en algunos
difíciles pasajes del complemento. En los buenos momentos del equipo apareció
poco.
Alan Velasco (8): Hermoso que el jugador que más esperanza
nos da de cara al futuro haya jugado un clásico así, con un primer tiempo
estelar. Arrancó ya picante con varias buenas gambetas y a los diez avisó lo
que haría. En esa se confió y luego de dos enganches definió suave a colocar,
algo que con Armani suele ser un error, porque llega a todas. Mete un gol de
antología dibujando a Ponzio y clavándola al ángulo y luego el segundo con una
clara complicidad del arquero. A los 26 anticipa de cabeza y casi convierte
nuevamente. No es figura porque no mantuvo el nivel y Sosa si. Una joya en el
desierto.
Jonathan Menéndez (5): Alternó buenas y malas. Fue importante
para salir a lastimar rápido tras recuperar, pero erró en la definición. A los
5 no llegó a conectar un pase largo de Silvio y a los 16 pifió tras un gran
pase de Bustos. En el complemento tuvo una a los 51, pero no se animó a darle
bomba y luego de enganchar se cayó.
Silvio Romero (5): Lamento no coincidir con Varsky,
periodista que admiro, pero fue malo lo de Silvio. Se conectó bien en algunas
jugadas, como cuando abre antes del gol, pero en la gran mayoría hizo lentas
las transiciones, haciendo negativa su intervención. A los 5 tenía solo a
Menéndez y se la tira larga, a los 51 enganchó y la tiró lejos y cinco después
le pegó de afuera y la mandó a Lanús.
Domingo Blanco (5): Reemplazó a Menéndez a los 59 para
acoplarse en el medio junto a Asís y no logró generar contras.
Thomás Ortega: Entró por Soñora y ayudó a controlar más el
sector izquierdo. Le metió un buen pelotazo a Martínez sobre el final.
Braian Martínez: Saltó a la cancha por Velasco y no pudo
generar nada.
Nicolás Messiniti: No entró casi en juego los minutos que
estuvo por Silvio.
Juan Pacchini: Al igual que Messiniti, casi no tocó la
pelota, entrando por Asís.
Fernando Berón: El Tanguero volvió a ser interino logrando
una victoria importante, para cortar otra racha, como había hecho en Mendoza.
Más allá del contexto, siempre es lindo ganarle a River y de visitante no se
conseguía desde el 2009, y esa es la estadística que queda. Ordenó al equipo
para tratar de anular y salir rápido y lo consiguió varias veces. Aprovechó a
un Velasco y Sosa en niveles estelares y en el complemento aguantó como pudo.
Metió cambios defensivos, pero fue obligado por el rival y además le sirvieron
para no pasar tantos sobresaltos, algo que ocurría al inicio del segundo
tiempo. Ojalá esta inoperante comisión directiva pegue una con la contratación
del mánager y el nuevo técnico, lo necesitamos como el agua.
Fuente Orgullo Rojo

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.