Una responsabilidad de todo el equipo

Independiente mostró en los amistosos ciertas falencias a mejorar. Eso busca el DT antes del inicio de la competencia. ¡Mirá!

Correr del eje la palabra «amistoso» es fatalista, en un contexto totalmente adverso. Independiente se está reponiendo de un éxodo pocas veces visto y Lucas Pusineri buscándole la vuelta a un plantel joven y con refuerzos que no tienen ni un mes de trabajo.

No obstante, en los seis partidos disputados hasta ahora -encerrados en 3 jornadas de amistosos contra Gimnasia, Morón y Banfield- sí hay características de los equipos que se repitieron y deben ser modificadas a las brevedad para incrementar el rendimiento colectivo.

Más allá de nombres propios, es menester para Independiente adaptarse a los funcionamientos del fútbol actual. Por la dinámica de estos tiempos, más física que técnica, hace falta que todos marquen. Desde el primer delantero hasta el último defensor. Y eso no se ha visto ni de cerca.

Si bien la figura del 5 de roce está despintada, no es culpa de Lucas Romero o de Juan Pacchini que el equipo no tenga contención. Si la presión en bloque no comienza en Silvio Romero y los extremos que lo acompañan, muy difícil será que los rivales no pasen con frecuencia la línea de los volantes. Como hace algunos años atrás, requiere de compromiso, de actitud y de intensidad en cada línea.

Esto no significa correr sin sentido atrás de la pelota, como nenes que arrancan en infantiles. Debe verse la mano del DT y su cuerpo técnico para implementar sistemas de presión y recuperación, para ahogar a los rivales lo más lejos posible del arco propio.

A eso le apuntará Lucas Pusineri en los próximos días de trabajo antes del reinicio de la Copa Sudamericana y del campeonato local.

Un sistema que le permita a Independiente volverse más agresivo para quitar y más determinante para concretar los avances. Es una realidad que al Rojo no le sobra nada, principalmente porque no está aceitado; por eso con lo que tiene debe volverse utilitario y práctico.

En el fútbol argentino hace falta que todo el conjunto esté comprometido con la recuperación, porque la pelota es el bien más preciado de todos. Independiente se carecterizó siempre por el paladar negro y por la pierna fuerte y templada; para que haya paladar negro (juego, tenencia con vocación ofensiva) tiene que haber pierna fuerte y viceversa. ¿Podrán lograrlo?

 

Fuente Infierno Rojo