viernes, 24 de junio de 2016

Mercado, nueve partidos y toda una vida en el seleccionado nacional





El lateral tiene un breve recorrido en la selección, pero su personalidad lo convirtió en un veterano; admirador de Zanetti, fue Caruso Lombardi quien lo afirmó por la banda derecha


Por Guido Molteni




Mercado no se permite distracciones en la marca de su compañero Agüero. Foto: LA NACION / Aníbal Greco



JERSEY CITY, Estados Unidos.- La ciudad a la que arribó la selección anoche vibra con su propio estilo a la espalda de Nueva York. Jersey City no quiere ser más que la Gran Manzana, se adapta, sabe que su lugar será siempre ser el de al lado de Manhattan. Por eso aquí se siente a gusto Gabriel Mercado, el hombre que está detrás de Lionel Messi y se adapta. Con su mentón de rottweiler, sus aparatos de adolescente y su cuello escondido, el lateral de la selección se pasea por Estados Unidos de manera silenciosa al lado de todas las estrellas y cumple su función a la perfección.



La historia de Gabriel Mercado y la selección no es nueva. Con algunos integrantes de este grupo, el defensor salió campeón del Mundial Sub 20 de Canadá. En aquel torneo que jugó de titular fue una de las primeras veces que ocupó la banda derecha, ya que en Racing, donde debutó, comenzó como central. Luego participó de un partido para la selección de Maradona antes de Sudáfrica 2010 e integró la lista de 30 preseleccionados para el de Brasil 2014, en el que finalmente quedó afuera. "Fue un momento muy difícil cuando me lo comunicaron", recuerda de manera sincera el hombre que en las actuales eliminatorias tiene dos goles, uno más que... Messi. "Eso es una casualidad, Leo jugó pocos partidos por su lesión, ya me va a pasar", dice en la zona mixta y muestra los brackets al sonreír.



Patalín, como lo llamaban cuando tenía cinco años, comenzó a jugar al fútbol en Puerto Madryn, la ciudad donde vivió hasta que siendo todavía un chico de escuela primaria se fue a probar a Racing y quedó en la pensión. De ser enganche en el sur pasó a ser delantero en Avellaneda. Esa posición le duró un año y luego, por su fortaleza y disciplina en la marca, lo bajaron al puesto de marcador central, en el que se destacó en la categoría 87 que compartió con Sergio Romero, Claudio Yacob, Maxi Moralez y Matías Sánchez. Ellos cinco, más figuras como el Kun Agüero, Ángel Di María y Ever Banega, entre otros, integraron el equipo de Hugo Tocalli que ganó de punta a punta el Mundial Sub 20. Y que eliminó a Chile en las semifinales.



Si bien en ese torneo tuvo un buen desempeño como lateral, se terminó de afianzar cuando Ricardo Caruso Lombardi llegó a Racing. En su primer partido en el club, el entrenador movió todas las piezas, corrió al habitual cuatro, Franco Sosa, como volante por derecha y ubicó a Mercado como lateral, puesto que no dejaría más. El dato llamativo de los 96 partidos que jugó en Racing es que hizo sólo un gol, muy poco si se tiene en cuenta que cuando dejó el club marcó 22 más. "Creo que eso se debe a que fui aprendiendo muchas cosas sobre la marcha. Aprendí mucho mirando los movimientos de Javier Zanetti o Dani Alves, ellos son mis referentes. Ahora me tengo más confianza, y cuando voy a cabecear en las pelotas paradas sigo mucho a mi intuición", explica el defensor, que luego de la Academia dejó una huella en Estudiantes, donde compartió equipo junto al otro lateral, Marcos Rojo, y en River, donde salió campeón de la Libertadores junto a Ramiro Funes Mori, Matías Kranevitter y Jonathan Maidana, con quien comparte la habitación en los Estados Unidos.





"Ellos más que compañeros son amigos. Es un gusto estar todos juntos otra vez. Como también con Chiquito Romero, con quien nos conocemos desde hace muchos años", dice Mercado, que a pesar de sus 29 años sigue dando pasos firmes en su carrera y por primera vez jugará en el exterior, ya que durante la Copa se confirmó que fue vendido a Monterrey, de México.



Aunque ahora parezca que siempre formó parte del ciclo Martino, ya que se adaptó muy rápido al grupo, recién fue citado en la cuarta fecha de las eliminatorias para cubrir la lesión de Pablo Zabaleta. Luego de su buena tarea ante Colombia, en Barranquilla, se ganó la confianza del DT, que lo convocó para los duelos ante Chile, en Santiago, y Bolivia, en Córdoba, donde marcó un gol en cada partido y se afirmó como titular.



Durante la Copa América Centenario, el lateral viene teniendo muy buenas actuaciones, aunque todavía no pudo repetir esa sana costumbre de marcar un gol. Tal vez el domingo, cuando todos los flashes apunten a Lionel Messi, sea él quien aparezca a su espalda, de sorpresa, y grite el gol más importante de los últimos 23 años en la selección.




Fuente Cancha Llena

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