Una ganancia de casi 38 millones de pesos para Independiente

Verano positivo

Es la cifra que le quedó al club entre las ventas al exterior y las compras para reforzar el plantel.

 Federico Mancuello fue el primero en dejar el club en el último receso. Se fue al Flamenfo por 42 millones. (Maxi Failla)

Por Nahuel Lanzillotta

La venta de Martín Lucero al Johor de Malasia concretada ayer significó un cierre del libro de pases con ganancia para Independiente. Al club de Avellaneda volvió a ingresar dinero por vender un futbolista propio luego de tres años y medio (la última venta había sido la de Patito Rodríguez al Santos en julio de 2012) y se retiró del mercado con un saldo positivo de casi 37 millones de pesos.

Su presidente, Hugo Moyano, repetía una y otra vez que no cometerá locuras a nivel incorporaciones. Cuidar la caja de un club devastado económicamente durante los últimos años es el objetivo del Tío Hugo, además de volver a dar una vuelta olímpica. Este verano, Independiente volvió a vender y lo hizo por tres. Los primeros en irse fueron Federico Mancuello y Matías Pisano al fútbol brasileño. Mancu fue vendido al Flamengo en unos 42 millones de pesos. En tanto, Pisano se fue al Cruzeiro por 12.600.000 pesos más la cancelación de la vieja deuda por Ernesto Farías (unos 9,5 millones). Por Lucero, al Diablo (tenía el 50 por ciento) le quedan 19.600.000. Sumando: Independiente recibe 74.200.000 en total.

Claro que también abrió su billetera para los refuerzos. Trajo a cuatro futbolistas y gastó 36.500.000. Adquirió la mitad del pase de Emiliano Rigoni en 15 millones y compró el 75 por ciento del delantero Leandro Fernandez en unos 19 millones. Además, pagó 2,5 millones por el cargo del préstamo del arquero Martín Campaña, que se descontará de la opción de compra en caso de utilizarla al término de la cesión. Germán Denis arribó con el pase en su poder.

La ganancia surgida de la diferencia entre las ventas y las compras es de 37.700.000 de pesos. Un verano positivo desde los números para la institución de Avellaneda, que, además, se desprendió de 26 contratos profesionales. La carrera para bajar el abultado pasivo tomó buen ritmo, ahora buscará saldar su deuda de títulos.

Fuente Clarín