La Selección necesita jugar como en varios minutos con
Brasil y, más que nada, ganar por primera vez en las Eliminatorias. Martino
desafía los rumores y planta un 4-1-4-1 con Mercado de sorpresivo lateral.
¿Habrá aire en la agobiante Barranquilla?
Por Hernan Claus
Que llueva. Que llueva como anoche para apagar el calor de
Barranquilla. Que llueva fútbol como en el primer tiempo con Brasil. Que llueva
y que la Selección sume su primer triunfo en estas Eliminatorias. Que llueva y
que los rumores sobre la continuidad de Martino peguen contra el paraguas. Que
llueva para apagar este calor desmedido que generó este mal arranque en el
camino a Rusia 2018 (que no llueva, eso sí, como el jueves del clásico trunco).
Hay que apagar el fuego de una vez por todas...
“Dos puntos de nueve no estaban en los planes de nadie”,
resumió Mascherano el pensamiento del plantel. Las matemáticas son exactas y es
difícil refutarlas. Se puede, claro que sí. Porque Martino armó un equipo que
nos hizo soñar en la Copa América, pero el final fue una pesadilla por los
malditos penales y lo que vino luego fue más complicado: arrancar las
Eliminatorias más duras de los últimos 30 años, sin medio equipo titular (hoy
faltan Garay, Zabaleta, Pastore, Agüero y Tevez, el primer suplente, y el mejor
del mundo (Messi) viendo todo por televisión. No es una excusa, es una
realidad. Tan realidad como la que marca Pekerman: “En Argentina no hay
jugadores de banco, son todos titulares”. El plantel es, otra vez como sucedió
en el clásico del viernes pasado, el que debe dar la talla. En un escenario
difícil, con una térmica que tocará los 40 grados (salvo que llegue el agua
bendita) y contra un rival que posee muchas virtudes, no sólo el calor y la
humedad de la colorida Barranquilla. Colombia tiene a James, tiene a Teo y
tiene una base de jóvenes que vienen jugando juntos desde el Mundial Sub 20 del
2011. A la Selección le falta esa renovación por los malos manejos en Juveniles
y, entonces, Dybala, por ejemplo, hace sus primeros palotes con la celeste y
blanca directo en la Mayor... Martino y su cuerpo técnico tienen todo listo.
Desde la táctica, que mutará de un 4-3-3 (el sistema que más le gusta al
técnico pero también al plantel) a un 4-1-4-1 con Mercado de sorpresa. Pasando
por la estrategia anti calor: mayor hidratación, mucha ingesta de hidratos de
carbono (la tradicional pasta), un descanso un poco más prolongado (ayer sólo
entrenaron a la mañana) para llegar más enteros al partido y una entrada en
calor made in altura: más elongación, menos carreras. Y cerrando por la parte
motivacional, con un grupo que llegó a dos finales, pero que se siente
cuestionado y que ese pasado que lo metió en los libros, hoy le está jugando en
contra en lo psicológico. Habrá 60.000 colombianos que buscan su revancha y que
no quieren que otra vez en el estadio Metropolitano arranque una nueva era
triunfal del fútbol argentino, como sucedió en el 2011 con el 2-1 del equipo de
Sabella.
Que llueva y que se apague el fuego como hace cuatro años.
BARRANQUILLA (ENVIADO).
Fuente Olé
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