viernes, 3 de abril de 2015

Una vela por Mancu




 Jugará Mancuello?



¿Cuánto pierde Independiente si Mancuello no puede jugar?

¿Por qué es clave para el equipo?

El Rojo necesita a su mejor jugador contra Gimnasia.


La prueba consistía en suplir su ausencia mediante el funcionamiento colectivo y demostrar que la idea está por encima de los intérpretes.

Pero el examen no fue superado con éxito ante Godoy Cruz (2-2). La estructura no pudo sostenerse sin la columna principal. Independiente padeció la falta de Federico Mancuello, el motor del equipo.

Jorge Almirón pensó que iba a poder contar con él para recibir el sábado a Gimnasia, pero la contractura en un isquiotibial izquierdo que sufrió jugando para la Selección contra Ecuador, podría impedirle estar frente al Lobo.


Su presencia es vital para Independiente por el acompañamiento que brinda en cada jugada, porque es él quien se encarga de orientar las maniobras de ataque, por el liderazgo que asume a la hora de ordenar al equipo apelando a su voz de mando, por lo que contagia, por la convicción que irradia para evitar que sus compañeros escatimen intensidad y constancia para someterse a altos niveles de esfuerzo. El Rojo no dispone de otro futbolista que ejecute la pelota parada con tanta precisión como el emblema del equipo.

"Es irreemplazable", sentenció, remitiéndose a las pruebas, Jorge Almirón. No es un enlace clásico Mancuello, pero sí reúne méritos para ser catalogado bajo el título de director de orquesta. No hay otro jugador que pueda ponerse el traje de conductor. Matías Pisano se lo probó y le quedó grande ante el Tomba.



Es Jesús Méndez, el eje que impulsa la dinámica y la circulación indispensables para la gestación del juego en el medio, quien más sufre la ausencia de Mancu. Juntos se potencian, aunque el potencial del ex Boca se disuelve cuando pierde a su socio, a su principal referencia para descargar. Sin el capitán, los espacios son menos y el déficit afecta a los delanteros: la pelota les llega con menor frecuencia y suelen recibirla condicionados. Si el ídolo no llega al duelo ante Gimnasia, Almirón tendrá otra oportunidad para sacar conclusiones y proyectar el futuro, ya que todo parece indicar que el volante partirá en el próximo receso. Si bien en un principio la idea del entrenador era ir preparando el terreno para que Pisano asumiera ese rol, luego abordó la certeza que su incompleto proceso de madurez le impide cargar con eficiencia semejante mochila.

Hoy, el Rojo no es Independiente.
Es Mancuellodependiente, más allá de algún eventual triunfo que pueda conseguir sin él.




Fuente Olé

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