Últimos triunfos ante los grandes.
La visita de Independiente será la 22ª de un grande a
Atlético que, como cualquier equipo, se motiva de una manera especial.
/"LA GACETA" DE TUCUMÁN.
Nadie tiene problemas en admitirlo: jugar con un grande
te hace más grande. No estamos hablando de un pequeño, no. Atlético tiene
historias paralelas a las vidas de Boca, River, Independiente, Racing y San
Lorenzo con las que le bastan para sentirse un adulto en el fútbol, pero sus
protagonistas de ayer y hoy saben que un partido contra cualquiera del
"Club de los 5" puede transformarse en una leyenda. Mucho más si se
juega en Tucumán, como lo hará el "rojo" mañana.
Todo empezó un 6 de febrero de 1969, por la Copa
Argentina, el día en el que por primera vez, Atlético recibía a un grande por
partidos oficiales. Boca llegó a la provincia para jugar no uno, sino dos
partidos en menos de cinco días. La cosecha fue una derrota y un empate, tal
como registra Silvio Nava, historiador. Luego, el 24 de octubre de 1973 el que
visitó al "decano" fue justamente Independiente y no cualquier
Independiente: el equipo de Avellaneda había ganado hacía unos meses la Copa
Libertadores por segunda vez consecutiva y levantaría la Intercontinetal, días
más tarde. Luego de ese partido y en el transcurso de 40 años, solo 20 veces
más, un grande vendría a Tucumán a jugar por los puntos. Es decir, la de mañana
será la vigésima primera ocasión y en Atlético quieren celebrarlo con un triunfo.
Sabido es que el historial del "decano" ante el "rojo" no
es bueno ya que le ganó un solo partido de nueve que disputaron. Esa solitaria
victoria fue en el Nacional de 1984 y aunque haya sido en Avellaneda, la receta
de Luis Reartez, el goleador de esa tarde, todavía puede servir mañana.
"El jugador incrementa su rendimiento contra los
grandes, es diferente. Por ahí jugábamos contra otros equipos y no era lo
mismo. La motivación parte de quien tengas enfrente", dice
"Correcaminos" que ese día anotó el segundo tanto del 2-0 final luego
de que Héctor Díaz, marque el primero. "Éramos jugadores todos del medio,
de Tucumán", agrega.
El triunfo resonó como cada uno de los que consiguió
Atlético ante un integrante del Club de los 5, algo que no sucede todos los
días, aunque con Boca, por ejemplo, es un caso especial. De 13 partidos que
disputaron, los de 25 de mayo y Chile se llevaron cinco. La última vez que el
"xeneize" estuvo en estas tierras coincidió justamente con la última
victoria "decana". Juan Palo Pereyra, quien amargó al equipo en la
fecha pasada jugando para Ferro, fue en 2009, el artífice de un triunfo
histórico.
"Fue uno de los mejores partidos que jugamos con
el "Chulo" (Héctor Rivoira) como DT. Jugar contra un grande tiene un
condimento extra y esa motivación existe", dice el "Flaco" que
convirtió el primer tanto de otro 2-0 histórico mientras que Fabio Escobar anotaría
el segundo. Aquella, es hasta ahora la mejor victoria de un equipo de Atlético
ante un grande.
Otra noche mágica en el Monumental. Casi tan mágica
como la del Nacional 75' donde el equipo consiguió su último y único éxito ante
San Lorenzo. Ricardo Villa anotó esa noche el gol del triunfo y como para
confirmar que los partidos contra los grandes te hacen más grandes, el relato
de su tanto, quedó en la historia tanto o más que el gol: "toma carrera
Palomba, la eleva para Villa, la para con el pecho... Peligro... tiró... ¡gol!
¡gol! ¡gol! ¡gooooool! ¡gooooool de Atlético!", cantó Osvaldo Caffarelli y
fue tal el apego de los hinchas a su relato que es parte de la marcha oficial
de Atlético.
Y qué decir del último (y también único) triunfo ante
Racing cuando visitó nuestra provincia en 1979. El partido se jugó en La
Ciudadela por una suspensión de su estadio, Atlético perdía 1-0 al término del
primer tiempo y Rogelio Domínguez mandó a la cancha a Héctor Nicolás Gómez y
Luis Barrientos para que hagan historia. "Ese fue un partido soñado.
Entramos e hicimos un gol cada uno. Él era un gran compañero", recuerda
ahora Gómez, el autor del empate, asistido también por Víctor Hugo Palomba.
"Un gol para la historia" tituló la primera
plana de LA GACETA sobre el segundo y definitivo tanto que ambos construyeron
con una pared en movimiento. "Fue una jugada muy rápida", advierte
Gómez antes de relatarla segundo a segundo. Y aunque para él, la motivación de
los grandes no era lo que se imponía en esos tiempos sino el estilo de juego
que profesaba Atlético, admite: "fue uno de los mejores partidos que jugué
en mi vida. Fue un gran momento de Atlético y fue un honor formar parte".
Sensaciones similares pasaron por la cabeza de Luis
Rodríguez y César Montiglio, los artífices del último triunfo sobre un grande y
justo, sobre el que falta analizar: River. Un 2-0, también por la B Nacional
como lo será ante el "rojo", que aunque esté en segunda es un grande
y motivará tal como contaron los protagonistas de la historia "decana".
Esa que cuenta que los grandes les ayudaron a ser más grandes aún. Atlético
derrotó a Boca (Pereyra y Escobar)."Pulga" y Montiglio, los autores
de los goles. Gómez festeja su gol. Barrientos hizo el otro. Reartez y Díaz
doblegaron al "rojo" en "BA". En Ciudadela, Villa marcó un
gol histórico.
Fuente La
Gaceta. Tucumán
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