Villalba: “Ganarme un lugar”

El juvenil y su sueño: “Ojalá pueda ayudar a mi familia”.

Por Favio Verona 

Eso es lo que desea Lucas Villalba, el pibe de 18 años que jugó el domingo y que volverá a ocupar el lateral, contra Boca Unidos, en la Copa Argentina.

El fútbol está plagado de historias similares. Raíces humildes, sueños que se cumplen y otros hechos añicos, futuros inciertos, protagonistas que encuentran en la pelota un salvavidas. Lucas Villalba disfruta de su presente, pero su historia es una más de todas las que comprenden el planeta fútbol.

-¿Tuviste que hacer sacrificios para llegar?

-Sí, fue un largo camino. Mi abuela Juana me metió en el fútbol cuando tenía diez años y me empezó a llevar al club América de Varela, mi barrio. Ella insistió para probarme en Independiente. Es muy futbolera y sabe bastante del tema. No fue fácil llegar. Vengo de una familia humilde y a los 15 años tuve que trabajar de albañil con Hernán, mi viejo, porque necesitábamos la plata para mantenernos. También laburé en una maderera. Gracias a Dios nuestra situación económica mejoró, pero ojalá con el fútbol pueda ayudar a mi familia.

-En cuanto a lo futbolístico, ¿cómo te definís?

-En Inferiores arranqué de cinco y después me pusieron de lateral. Trato de priorizar la marca, pero me gusta pasar al ataque por sorpresa. Contra San Martín me ahogué en los primeros minutos, pero después me acomodé y subí para ser opción de pase arriba. Brindisi me felicitó.

-¿Cuál es tu mayor virtud y tu punto débil?

-Soy bueno para agilizar la salida por abajo y descargar. No rifo la pelota. Debo pelear más en los mano a mano para que no me desborden, ser más duro en la marca, mejorar la pegada y el cabezazo.

-¿Alguien te aconsejó?

-Hablo mucho con Morel y Vargas. Claudio remarca mis errores y me enseña los secretos del puesto.

-¿Motiva que Brindisi haya viajado?

-Esta será otra chance para ganarme un lugar. El confió en mí en un momento difícil y quiero demostrarle que estoy capacitado.

Fuente Olé