Por Beto Tisinovich
El equipo tenía que reaccionar. Lo hizo y es motivo para
destacar cuando se acerca la recta final del campeonato, en la que jugaremos
contra Racing y San Lorenzo, y se definirá el torneo. Ocurrió en un momento
justo, luego de los traspiés contra Sarmiento y Olimpo -los seguimos
lamentando- y en una cancha que nos fue esquiva muchas veces. Los muchachos
tuvieron actitud y juego, sacaron el partido adelante y de haber contado con
mayor efectividad, el resultado hubiese sido más amplio. Para conseguir este
rendimiento, vinieron bien las quejas de los directivos y de Pellegrino. Ambas
partes le tocaron la fibra al plantel.
Quedó claro que Rigoni no puede faltar, se celebra el primer
gol de Ortiz en el club y la voluntad de Leandro Fernández. En esa movida
acertó el DT, le salió bien la jugada de sacar a Denis. Sabía que se jugaba el
futuro en el club, se la jugó por su idea y tuvo un premio: encontró el
funcionamiento y no sufrió sobresaltos. Mérito de la defensa, que comenzó desde
el ataque con la presión, más los puntuales como Cuesta y Tagliafico. Además,
de la seguridad de Campaña, que completó el tercer juego sin recibir goles.
Ahora hay que seguir en esta tendencia, con este hambre de gloria. Esto sigue,
no pido lujos, sino que tengamos una identidad, fiel a nuestra historia.
Fuente Olé
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