El Gordo Núñez en tiempos de Olympiakos.
Por Favio Verona
La quita de puntos que sufrió Colón despertó a la CD, que
debe cancelar las deudas por Núñez y Farías para evitar una sanción similar.
“Acá la sangre no llegará al río”, dijo Felice, el tesorero.
Muchos subestimaron la situación. Cuando el 23 de agosto Independiente
fue intimado a través del TAS por sus respectivas deudas con Olympiakos y
Cruzeiro, varios pensaron que la agenda mediática que marca tendencias y
deglute progresivamente el pasado, se encargaría de sepultar el tema. Este caso
fue la excepción. La quita de seis puntos que sufrió Colón el viernes por un
caso similar fue un cimbronazo que sacudió los cimientos en Avellaneda. Al club
le advirtieron que la sanción podría contemplar una deducción de tres a seis
puntos. Después del temblor, los dirigentes de Independiente se despertaron de
la siesta y se percataron de que esta vez va en serio. El Rojo le debe u$s
1.800.000 más punitorios a Olympiakos por el pase de Leonel Núñez, quien arribó
al club por u$s 3.100.000 en 2008 bajo la gestión de Julio Comparada. Además
existe una deuda de u$s 500.000 con Cruzeiro por el préstamo de Ernesto Farías.
A dicho monto hay que añadirle los intereses más una posible multa que aplicará
la FIFA.
Los acreedores le solicitaron a la FIFA que tome medidas. El
TAS se comunicó con la AFA para plantear plazos perentorios que no conceden
margen de error. Los días pasaron y el Rojo ya está en tiempo de descuento. Y
los directivos acorralados. Disponen de apenas 10 días para apelar la sanción.
La dirigencia sabe que deberá resolver el problema cuanto antes, por eso ya
están inmiscuidos en la búsqueda de una solución. “La sangre no va llegar al
río. Estamos lejos de que nos pase lo que le sucedió a Colón. En el caso de la
deuda por Núñez, la semana que viene vamos a apelar ante el TAS para estirar a
tres meses el arreglo. A los griegos les vamos a ofrecer algún jugador del
plantel como forma de pago porque para nosotros es imposible conseguir la suma
que nos están exigiendo”, le comentó el tesorero del club, Luis Felice, a Olé .
Y también detalló los pormenores que envuelven el caso de la deuda por Farías.
“Nos avisaron que el lunes 18 va a llegar al país un emisario del Cruzeiro para
reunirse con nosotros. Ellos quieren la plata, pero nuestra situación económica
es muy compleja. Trataremos de acordar un plan de pagos y estoy convencido de
que lo vamos a solucionar. A nosotros no nos van a sacar puntos, que los
hinchas, el cuerpo técnico y los jugadores se queden tranquilos”, se explayó
Felice.
Las palabras del tesorero sustentan una presunción
inequívoca: todo estará supeditado a la buena predisposición de los acreedores.
Si los directivos de Olympiakos y Cruzeiro exigen el pago del dinero al contado
y no aceptan las propuestas de la CD del Rojo, la sanción será inapelable.
Fuente Olé
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