Talento. Gol de San Lorenzo. Lo grita Belluschi contra
Independiente.
La obsesión no es nueva, sino que viene desde antes de este
verano: Ariel Holan quiere contar sí o sí con Fernando Belluschi en su
Independiente modelo 2018. Sin embargo, al menos por ahora, el entrenador que
acaba de consagrarse con los de Avellaneda en la Copa Sudamericana deberá
esperar. ¿La razón? 2,5 millones de dólares. Esa es la diferencia de dinero
entre lo que ofrece Independiente (4,7 millones de dólares) y lo que pretende
San Lorenzo (7,2) por el pase del volante.
Ya lo había dejado en claro Matías Lammens, el presidente de
los azulgranas, hace algunos días: la única manera de que Belluschi deje Boedo
es si Independiente está a la altura de las expectativas azulgranas, que tienen
un piso de siete millones de dólares. Existe una cláusula de rescisión en el
contrato del Rasta, es cierto. Pero tanto desde las oficinas del Nuevo
Gasómetro como desde el entorno del futbolista fueron tajantes ante la consulta
de Clarín: Belluschi no ejecutará esa opción, que es de cuatro millones de
dólares brutos.
Este, por supuesto, es el primer impedimento que tiene
Independiente, que de todas maneras cuenta con dinero fresco por la venta de
Ezequiel Barco a la Major League Soccer de los Estados Unidos (partió a cambió
de 15 millones de dólares), pero que tampoco piensan tirar la casa por la
ventana por un futbolista de 34 años.
En San Lorenzo, por lo pronto, no piensan en moverse de su
postura. “Si llegan a ese número será una oferta imposible de rechazar”, le
aseguró a este diario un dirigente de peso, consciente tanto del negocio que
puede hacer el club (Belluschi había llegado libre de México en enero de 2016)
como del problema que se le presentará en caso de su partida: el volante es
pieza clave del esquema de Claudio Biaggio y la Superliga se reanuda en una
semana y media.
¿Qué piensa Belluschi? El jugador, por el momento, elige el
silencio. El sábado pasado fue titular en la victoria de San Lorenzo ante
Argentinos, pero se retiró del Nuevo Gasómetro sin realizar declaraciones. Su
deseo para estos próximos meses es tener la continuidad necesaria para
mostrarse frente a Jorge Sampaoli y convencer al entrenador de la Selección
Argentina para que le dé un lugar entre los 23 apellidos que irán al Mundial de
Rusia. Esto es algo que tanto en Boedo como Avellaneda se lo prometen, aunque
con una diferencia: Independiente, en este 2018, tiene en el calendario la Copa
Libertadores, algo que los azulgranas no.
¿Se acercará Independiente a lo que piden en San Lorenzo?
Fuente Clarín
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