Los dos goles de Independiente ante Chacarita necesitaron
exclusivamente de tres intervenciones, con mucha precisión y pocas vueltas.
El sueño de muchos es convertir goles con 50 pases como el
Barcelona de Pep Guardiola, pero el sueño de todos es ganar; y eso hizo
Independiente ante Chacarita: ganó. En los dos tantos del domingo por la
mañana, el Rojo fue totalmente directo y punzante. Sin rodeos, con tres toques
y velocidad.
En el primero, Gastón Silva intervino en gran manera para
cortar, anticipar y asistir a Ezequiel Barco. Una exquisita pared dejó a
Fabricio Bustos de cara a Pedro Fernández y el lateral cruzó el remate para el
empate transitorio. ¡Un golazo simple!
Para el 2-1, la jugada tampoco solicitó demasiada
participación. Jonás Gutiérrez sacó de cabeza, Maximiliano Meza controló y
habilitó de forma extraordinaria a Barco; para que la joya domine y convierta
de zurda. Independiente fue directo y se quedó con 3 puntos importantes.
Fuente Infierno Rojo
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