Vistas de página en total

domingo, 23 de julio de 2017

Sergio Marchi pone en suspenso el arranque del torneo: "Esto es fútbol profesional: juega el que puede y no el que quiere"

El líder del sindicato de futbolistas alerta sobre las deudas con los planteles y vuelve a sembrar interrogantes sobre el comienzo del campeonato; dice que a la Superliga le faltan horas de trabajo
Por Alejandro Casar González y Fernando Czyz


Sergio Marchi, el hombre que pretende que la Superliga empiece de cero con las deudas a los futbolistas. Foto: Daniel Jayo

Carlos Gardel y Lionel Messi dominan la oficina de trabajo de Sergio Marchi , el secretario general del gremio de los futbolistas. Sobre la pared, fotos de jugadores consagrados que no distinguen la categoría. Desde Daniel Bazán Vera hasta Diego Armando Maradona. En una mesa amplia se apilan carpetas. Folios. Hojas y hojas de papel. Algunas parecen listas de supermercado, con números garabateados. Muchas veces, ésas son las únicas pruebas que el sindicato tiene del dinero que les deben los clubes a los futbolistas. La suma de todos esos papelitos vuelve a dar $500 millones, como en marzo. Es el total de la deuda que los clubes mantienen sus planteles y que, otra vez, vuelve a poner en jaque el inicio de los torneos. Como en marzo.


-Cuatro meses después, el fútbol argentino está en el mismo lugar. ¿Qué pasó?

-Estamos en una situación nuevamente compleja, difícil. Hay muchos clubes que han pagado muy poco desde que se levantó la huelga. Estamos viendo cómo va a iniciar una etapa nueva, superadora, que trata de promover una transformación, y entendemos que si no hay reglas claras de control, de fiscalización, si el que no cumple no sabe de antemano qué le va a caer, es muy difícil. Ya arrancaríamos mal.

-¿Por qué no hay siquiera un registro contable de lo que los clubes les deben a los jugadores?

-Acá, la excepción es la regla. Hay muchas actividades que tienen inconvenientes, y el trabajador tiene que recurrir a sus sindicatos o a alguna acción judicial. Aquí, lo natural es que no te paguen e ir a reclamar. Encontrás como algo excepcional al que te paga. Debería ser al revés. Por eso existe la inhibición. Si no existiera, no paga nadie.

-¿Los futbolistas cobran más de lo que el producto fútbol puede pagar?

-¡De ninguna manera! La masa salarial del fútbol es inferior a los ingresos del fútbol.

-A ver, supongamos que soy dirigente y te digo: los ingresos del fútbol son inferiores a lo que les pagamos a los jugadores, empleados, técnicos, seguridad.

-Yo digo, cuestión puntual del fútbol. El desempeño del fútbol, la movilidad del fútbol, los ingresos del fútbol superan largamente (¡largamente!) los egresos. De todas maneras, no se ha hecho un análisis para esta etapa que viene. Y no se puede hacer porque no hay tiempo. En 30 días no podés. No hay un análisis de cuánto dinero va a recibir determinado equipo y cuánto dinero podría gastar para la próxima temporada.

-Eso es el fair play financiero.

-Y no existe. En el fair play financiero hay que pagarles a los jugadores, a los entrenadores, a los médicos que cuidan a los futbolistas, a los kinesiólogos que recuperan a los futbolistas. Hay que pagar a los empleados. Y hay que pagar lo que le compraste a otro club. Entonces, ese ratio de gastos...nadie sabe si determinado club lo cubre o no.

-¿Quién lo tenía que haber hecho? ¿La Superliga?

-Claramente.

-¿Por qué no lo hicieron?

-No lo sé. Entonces nosotros decimos: vamos a sentarnos con este poco tiempo que tenemos, porque tenemos una propuesta.

-¿Ya la llevaron?

-No, porque no hemos tenido una reunión de trabajo. Queremos ayudar.

-Hablaste de ratios financieros entre ingresos y egresos que no se hicieron...

-Tampoco se conocen los presupuestos de los clubes, no se hizo una revisión de los contratos ni de la deuda. Y de alguna forma la cara mala del conflicto siempre somos nosotros porque decimos lo que nadie quiere escuchar.

-¿La Superliga es consciente de que si no prospera este diálogo no va a empezar el fútbol?

-Creo que sí, porque entiendo que en el espíritu de todos está no tener inconvenientes. Pero hay que ponerse a trabajar. Lo que no hubo son reuniones de trabajo, que seguramente las va a haber. Las tiene que haber, porque si esto [la Superliga] empezara así, empezaría muy mal. Si no conocés los contratos que tenés registrados. No conocés los contratos que vos vas a registrar. No conocés el presupuesto de los clubes, no conocés si tenés ratio o no, no conocés nada.

-En ese caso, ¿qué es la Superliga?

-Sería Superliga sólo por la cantidad de equipos. No tiene ningún tipo de avance con respecto a lo que teníamos antes.

-¿Hay algo superador?

-Los fondos que van a recibir, porque se reúnen para ver cómo reparten en dinero, cómo consiguen el naming del campeonato, si la pelota la cobran o no la cobran. ¡Y no se reúnen para ver cómo les van a pagar a los futbolistas! No se reúnen para ver cómo van a controlar. Cómo van a fiscalizar, que es fundamental. Arrancan incumpliendo. No se puede arrancar una competencia sin saber si determinado equipo le compra el centrodelantero al otro y si después se lo va a pagar. No podés arrancar una competencia cuando un club debe tres meses de sueldo. Y si paga o no paga. ¿Qué saben? No saben nada.

-¿Cuántos clubes están inhibidos?

-Pero no es la inhibición...

-Si el 50% de los clubes están inhibidos, el torneo no puede comenzar.

-El 50% de los equipos está fuera de las normas. Mínimo.

-¿Cómo conviven este "empezar de cero" del que hablás con la exigencia de la AFA de estar todos al día?

-Soy realista: hay clubes que no van a poder pagar. Vos tenés clubes que hoy van a jugar en Primera División que están debiendo tres meses y medio de sueldo, percibiendo más dinero que el que van a percibir en la temporada de primera porque les van a quitar un pedazo de guita: el 50%. Y van a tener que potenciar (si lo potencian) su plantel. Entonces, si hoy con un plantel de Nacional B no podían con unos ingresos superiores a los que van a tener en Primera, con un plantel más grande, no me explico. Entonces, cuando hablamos de la Superliga...¡No, eso no es un hecho superador! Y ni que hablar las diferencias deportivas que va a haber, si hay verdaderos controles. Hasta ahora, no hay ningún control.

-Si sabés que hay clubes que no van a pagar, que deben tres meses y medio, el torneo no empieza.

-Como estamos hoy, si este domingo hubiera que jugar, seguramente no se podría. El camino es ponerse a trabajar. El fútbol genera dinero para poder resolver los temas económicos. Algunos tendrán que poder competir con lo que tienen, no con lo que quieren. Pero van a poder competir. Vas a jugar con lo que tenés. O con lo que podés. No con lo que querés. Esto es fútbol profesional: juega el que puede y no el que quiere. Sobre estos conceptos debemos construir una realidad distinta. El fútbol tiene que entender que no puede gastarse el futuro. Hay que vivir con el dinero ordinario, que generás vos por la competición. Y el dinero extraordinario que te genera la transferencia de un futbolista, es para potenciar tu institución, para mejorar los estadios, los accesos, para invertir en futbolistas de otras categorías.

-¿Todo este tiempo que le dedicaste a defender los derechos de los futbolistas fue en detrimento de tu vida personal?

-No me gustaría que el fútbol sea centralista, aduanero y portuario. Me gustaría que fuera equilibrado, federalista y no unitario. Hay un pensador indiscutido: Arturo Jauretche. En 'Manual de zonceras argentinas' escribe algo del hombre que se adelantó a los tiempos y habla de Bernardino Rivadavia: de la noche a la mañana diseñó un canal para sacar todas las riquezas del interior. Y eso nunca se hizo por el sencillo motivo: en ese lugar no hay agua. Hay algunos que dicen "La Superliga" y piensan en algo que no va a poder ser porque no están haciendo nada para que pueda ser. No quiero un fútbol unitario, no quiero quedarme con el puerto, la aduana, la Mesopotamia y que el resto, afuera.

500 millones

es el monto global de los atrasos en todas las categorías, según los registros de Agremiados; la Primera División concentra el 92% de ese rojo.

40 millones

es la deuda con los planteles de las categorías de ascenso, menos del 10% del global; según Marchi, el gremio ya se puso de acuerdo con la AFA para poner al día a los fubolistas a corto plazo.



Fuente Cancha Llena

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.